En otras entradas hemos expuesto igualmente que es difícil que las tabaquerías canarias se dediquen en exclusiva a la venta de tabaco y artículos para el fumador. La mayoría inmensa le añaden otros tipos de géneros o servicios, asemejándose más a lo que denominamos 'bazares'. A la inversa, muchísimos establecimientos de infinidad de tipos agregan la venta de tabaco como complemento.
Sin embargo, no vamos a puntuar específicamente a las tabaquerías porque lo sean en exclusiva. Si todas ellas fueran verdaderos santuarios del tabaco, conocedores profundos de los puros y de lo que venden, quizá fuera lógico adjudicarles un punto más por ser establecimientos especializados. Pero la realidad es que hay tabaquerías netas cuyos empleados hacen gala de profundas carencias, o incluso de desprecio por la sección de puros o de la de fumadores de pipa. Por contra, existen otros establecimientos multi-género donde se muestra un nivel de atención descollante a las labores del tabaco.
Despejada esta duda inicial, hay que recordar que nosotros somos un club para fumadores tradicionales de tabaco, que no se tragan el humo. Vamos a valorar las tiendas con arreglo a los siguientes criterios, que podrán irse ampliando en la medida en que concluyamos su necesidad:
PUROS
- Existencia de sección para puros y su importancia relativa.
- Grado de accesibilidad de los puros. Los puros deben poder verse de cerca, aunque sea a través de los cristales de vitrinas cerradas. Hay sitios donde los puros solo están en estantes detrás del mostrador del empleado, lejos de la vista. En estos casos, o los clientes ya saben a lo que van, o se encuentran en desventaja si quieren mirar y decidir. Las vitrinas, por tanto, deben estar fuera de los mostradores del vendedor, o en una disposición que habilite el acceso sin perjuicio para nadie.
- Precios a la vista y bien claros, por conjunto (cajas, mazos, etc.) y a cuánto queda cada unidad en ese caso. Igualmente debe quedar claro si se venden sueltos, y a cuánto.
- Porcentaje de puros en cavas y/o humidores. Son pocas las tabaquerías con cavas. Las que conocemos tienen todos sus puros en ellas, incluso los mecanizados. Algunas tienen todos los puros en humidores, a veces en varios dispersos por el local. Algunas tienen una porción en humidores, en algunos casos por obligación o para aquellos que se venden sueltos, y el resto en vitrinas cerradas pero sin control de humedad. Otras los tienen en estantes abiertos y sin mayor protección, o en un combinado de vitrinas cerradas y estanterías abiertas. Si el índice de rotación es muy alto, probablemente sea suficiente con tenerlos en vitrinas, porque muchas tabaquerías de Gran Canaria parten de la idea de que la humedad relativa media anual se acerca mucho a la recomendada, y las temperaturas tampoco suelen llegar a extremos exagerados y las medias también están cerca. Pero con esa teoría hemos comprado mazos de puros desprotegidos que supuestamente eran de alta regalía y baja venta y que ya estaban secos. Eso significa que los puros deben estar bien conservados, porque los puros comienzan el proceso de deterioro desde el momento en que salen hacia su distribución. Mantener un puro por un tiempo considerable implica protegerlo por medios artificiales, que son, precísamente, los humidores o las cavas. El fumador podrá decidir qué hacer, pero las tabaquerías deberían tener las protecciones suficientes.
- Grado de mantenimiento de dichas cavas y de los humidores. ¿De qué sirve tener los puros en un gran humidor, si no les hacen el adecuado mantenimiento o ni siquiera revisan el grado de humedad?
- Grado de disponibilidad de todos los accesorios para fumadores de puros, según nuestro listado. Por ejemplo, la mayoría de las tabaquerías no venden higrómetros. Independientemente de lo que piensen los dueños, puede haber fumadores meticulosos en este tema y no es de recibo que todo el postproceso de conservación personal quede a merced de la desidia de las tabaquerías y los fumadores tengan que buscarse la vida. Si una tabaquería, como sucedió un día, nos recomienda agua destilada para los humidificadores, entonces debe tener humidificadores y agua destilada a la venta.
- Conocimiento sobre el mundo de los puros y en especial de los canarios. Por ejemplo, hemos estado en una tabaquería neta donde nos negaron la existencia del Condal nº 1 y nos afirmaron que esa marca solo fabricaba otras vitolas (las que ellos tenían). Asombroso. No nos dijeron "ahora no nos queda", ni "no trabajamos ese tamaño de esa marca". Nos afirmaron rotundamente que Condal no fabricaba ningún nº 1. Nosotros le demostramos que sí, y entonces se quedaron en treinta y tres. Eso es desconocimiento.
- Otra cosa es la Veracidad, intentar pasar una cosa por otra, a ver si cuela, como decir "esa marca ya no llega a Gran Canaria" o "la fábrica ya no trabaja esa gama", o intentar esconder la diferencia entre tripa corta y tripa larga, o decir que un puro es palmero en vez de grancanario, sabiendo que es falso o, al menos, que ellos no saben. Es una falta de consideración hacia los clientes. Especialmente lamentable cuando se realiza ante clientes inexpertos que quieren adentrarse en el mundillo. En vez de ayudarles, los despitan y malforman.
PIPAS PARA TABACO (tradicionales: saborear en paladar sin tragar el humo)
- Existencia de sección para pipas de tabaco y su importancia relativa.
- Quizá a menor escala, pero cumplen aquí las mismas consideraciones de más arriba. Ejemplos: hay tabaquerías que venden algunas marcas, pero no venden las pipas; o empleados de algunas que no saben si tienen tabaco negro para pipa, porque ni siquiera sabían que eso existía.